martes, 5 de febrero de 2008

El asesino de viudas

Henri Désiré Landru (París, 12 de abril de 1869 - Versalles, 25 de febrero de 1922) fue un famoso asesino en serie francés, también conocido como el "Barba Azul de Gambais".

Sus primeros años
Landru nació en una familia modesta obrera parisina. Su padre, hombre recto y religioso, trabajaba como fogonero en una fundición industrial mientras que su madre era costurera. El pequeño Henri demostró ser un gran estudiante aunque con una afición desmedida a aspirar a una buena vida futura.

En 1889, se ve forzado a casarse con su primera hermana Marie Reny a causa de un embarazo no deseado. Con ella, tendría tres hijos más. Durante esa época, Landru empezó a ganarse la vida honradamente como vigilante de garaje y administrativo. Pero la necesidad de llegar a un nivel de vida más alto le llevó hacia la delincuencia. Entre 1902 y 1914, algunos delitos menores por estafa le valieron tres penas de cárcel sucesivas lo que acarreó que su padre, avergonzado por el comportamiento de su hijo, se quitara la vida ahorcándose en un árbol en el Bois de Boulogne.

Una de esas condenas, la cumplió en una de las facetas con los que desarrollaría sus planes de futuro. Una tarde de 1909, Landru acudió a la cita de una desconsolada viuda llamada madame Izoret, que en un anuncio de prensa ofrecía su patrimonio a cambio de un varón que la pudiera hacer compañía. El estafador se presentó en su casa y le ofreció compañía a base de promesas vanas para luego llevarse 20.000 francos. Con el tiempo, Madame Izoret empezó a sospechar hasta que denunció al estafador, que fue arrestado. En su tiempo preso, Landru reflexionó la posibilidad de seguir siendo el perfecto compañero de viudas solitarias pero asesinándolas para que no pudieran acusarle más.

En 1914, Landru se escapa de una condena de varios años por el último de sus fraudes. La escasez de pruebas, sus diferentes personalidades y el estallido de la Gran Guerra favorecieron su huida.

Nace el asesino
La Primera Guerra Mundial le proporcionó a Landru la oportunidad de refinar su talento de consolador de jóvenes viudas. Y es que, las bajas que a diario se producían en el frente de batalla, aumentaba constantemente el número de viudas, quienes colocaban en los periódicos anuncios matrimoniales. Landru comprendió que un hombre como él, atractivo y joven aún, podía aprovecharse de esta situación.



Y así fue como el futuro asesino volvió a publicar anuncios en la prensa. El de mayor impacto fue uno que apareció en Le Journal en el que decía: "Viudo, dos hijos, cuarenta y tres años, solvente, afectuoso, serio y en ascenso social desea conocer a viuda con deseos matrimoniales". En seguida centenares de mujeres respondieron a su propuesta. Landru fue descartando a todas aquellas con pocas posibilidades. A las otras, les enviaba una respuesta para recoger más información y asegurarse de la rentabilidad del idilio.

La primera seleccionada fue Jeanne Cuchet, una hermosa mujer de 39 años, con un hijo de diecisiete (André) y unos 5.000 francos ahorrados. Landru alquiló un piso en el barrio de Vernouillet y adoptó la identidad de Raymond Diard, inspector de correos, proveniente de Lille debido a la ocupación alemana. Barba Azul fue un excelente y educado pretendiente que evidentemente, prometió matrimonio a madame Cuchet. Pero, en enero de 1915, cuando empezaron sus sospechas, madre e hijo desaparecieron para siempre. Landru los descuartizó en el pequeño apartamento para luego quemarlos en la chimenea.

Posteriormente, Landru continuó con su método delictivo. Alquiló una casa en las afueras de París. Allí iba invitando a las sucesivas conquistas, bajo la promesa de matrimonio. Consiguió su segunda víctima. De nuevo una viuda con más dinero que la anterior, madame Laborde-Line. Con ella siguió la misma técnica que con madame Cuchet, se presentó como Dupont, empleado del servicio secreto, y al tiempo le propuso que se marchara a vivir fuera de París quedándose él con sus ahorros para invertirlos en aquella desastrosa época de guerra. Poco después, madame Laborde-Line sería asesinada e incinerada en el salón de la casa parisina.

Traslado a Gambais
Landru vivía feliz sus nuevas riquezas al tiempo que no levantaba sospecha por sus crímenes. Pero el hecho de cambiar constantemente de casa suponía un fastidio por el hecho de dar constantes explicaciones tanto al casero y a los vecinos por su marcha como a su propia mujer por sus constantes idas y venidas. Así que alquiló una casa en la localidad de Gambais, a la que llamó "Ermitage".

De 1914 a 1918, Landru siguió con sus fechorías. Invitaba a viudas para promterles matrimonio y, cuando se seguraba que disponía de su dinero para "inversiones futuras", las asesinaba y las quemaba en el horno de la casa.

Mientras todo eso pasaba, llevaba una vida casi normal. Visitaba a sus hijos con frecuencia, mostrándose con ellos como padre atento y a su esposa le regalaba regalos carísimos.

Barba Azul es descubierto
Pero, una vez acabada la guerra, los parientes empezaron a buscar a sus desaparecidos. Ése fue el caso de los familiares de Madame Collomb, que enviaron una carta al alcalde de Gambais, solicitando cualquier tipo de información sobre su parientes, a la que se había visto en ese pueblo en compañía de un tal Dupont.

Pero no fue hasta la intervención del inspector Belin, cuando el cerco de Landru empezó a estrecharse. La clave la dio la hermana de madame Buisson que acudió al policía cuando se cruzó con el "pretendiente" de su hermana desaparecida comprando obras de arte en una tienda de Rue Rivoli. . La policía interrogó al comerciante y encontró que Désiré, había dejado su tarjeta "Lucien Guillet, 76, Rue Rochechouart". Allí se dirigió la polícia para detener al asesino el 11 de abril de 1919 en compañía de su nueva "amante", la actriz Fernande Segret.

Una vez en la prefactura se pudo conocer la auténtica identidad del asesino gracias a una agenda. En ella, también se pudieron encontrar once nombres, cuatro de ellas coincidían con desparaciones ya constatadas y también, con una meticulosidad asombrosa de ahorrador compulsivo, los precios de los boletos de ferrocarril de París a Gambais.

El 29 de abril, Landru, acompañado de los gendarmes, viajaron a Gambais. Allí se pudieron encontrar 295 huesos humanos semicarbonizados, un quilo y medio de cenizas y 47 piezas dentales de oro que Landru guardaba en un cajón. Poco después, se pudo confirmar que el psicópata había vendido ropas, muebles y enseres de sus víctimas.

El juicio de Landru duró unos dos años y fue uno de los más sonados del París de entreguerras. Aunque Landru reconoció haberlas engañado, jamás confesó la autoría de los asesinatos. Al final, el 30 de noviembre de 1921 sólo fue condenado por once asesinatos probados, aunque la policía calculó que que entre 117 y 300 mujeres fueron matadas por Barba Azul. El 25 de febrero de 1922, Landru fue guillotinado en la cárcel de Versalles.

En 1963, se descubrió por casualidad una carta de Landru en la que reconocía ser el autor de los crímenes. La vida de este psicópata fue llevada al cine en una famosa película llamada "Landrú", dirigida por Claude Chabrol ese mismo año. En 1947, Charles Chaplin hizo una película inspirada también en su vida, llamada Monsieur Verdoux.

sábado, 2 de febrero de 2008

Vlad Tepes

Vlad III de Valaquia fue un Príncipe de Valaquia (hoy parte de Rumania), considerado el originario Conde Drácula e inspirador de la obra literaria del mismo nombre.
Nació en la hoy ciudad rumana de Sighişoara (Transilvania), el 8 de noviembre de 1431 y murió en batalla en diciembre de 1476 en las cercanías de Bucarest. También es conocido como Vlad Ţepeş (pronunciación: tse'pesh) o Vlad el Empalador.

Gobernante de carácter volcanico e impredecible, fue el más duro de todos los gobernantes de Europa Oriental en el Siglo XV. Fue uno de los tres hijos de Vlad Dracul (que significa Dragón o Demonio, de donde viene el término Drácula o Drăculea: hijo de Dracul), quien fue incluido en la Orden del Dragón de manos de Segismundo de Luxemburgo, también rey de Alemania, Bohemia y Hungría, en 1428. Dado que en la mitología rumana no existían los dragones, por analogía fonética de "Drac" (dragón en Húngaro) pasó a ser conocido como "Dracul", que en Rumano significa diablo o demonio.

De Vlad III de Valaquia, se cuentan numerosas historias y leyendas. Fue rehén de los invasores otomanos hasta los diecisiete años de edad, cuando logró tomar el trono de Valaquia, del cual fue depuesto poco tiempo después. Sin embargo, en 1456, tras la Batalla de Belgrado, Vlad ascendió de nuevo al trono, tras matar a su contrincante Vladislav II, y ya no lo abandonó hasta 1462. Después vivió en el exilio hasta 1474, momento en que se lanzó de nuevo a la batalla para recuperar el cargo, lo que conseguiría en 1476. Sin embargo, en diciembre de este año caería luchando contra los turcos, rodeado de su leal Guardia Moldava.

La leyenda negra
Vlad se hizo famoso por tres cosas: su increíble arrojo y valentía (murió luchando con un ejército de tan solo 200 hombres contra un ejército de 120.000 turcos, algo que había hecho antes varias veces con éxito), su implacable sentido de la justicia y su extraordinaria crueldad, capaz de llamar la atención incluso en aquellos tiempos sangrientos. Como su apodo Tepes indica, su argumento contundente favorito era el empalamiento, una técnica de tortura y ejecución que consiste en introducir un palo sin punta, (ya esto aseguraba un mayor sufrimiento en la víctima), por el ano o la vagina hasta la boca o el hombro, fijarlo a la carne con un clavo y después levantarlo para que la víctima muera allí lentamente, entre dolores atroces. Al menos cien mil personas, murieron de esta manera a manos de los hombres del Empalador durante los siete años que duraron sus sucesivos reinados: enemigos, traidores, delincuentes de todo tipo y las familias de todos ellos, incluyendo a los bebés, y a elementos de su propia milicia que "merecían" ser castigados.

Durante todo su reinado se caracterizó como un auténtico patriota y siempre defendió los intereses de su pueblo ya que tanto húngaros como turcos miraban a sus territorios como región a conquistar. Casi siempre contó con un ejército reducido y muchas veces utilizó las tácticas de la guerrilla (utilizaba la táctica de tierra quemada, infectaba los pozos de agua, mandaba enfermos de tuberculosis a los campamentos turcos) para luchar contra sus enemigos.
Su traumática infancia, fue muy determinante a la hora de formar su futuro como príncipe. A los 13 años, en 1444, fue entregado a los turcos como rehén junto con su hermano Radu, por su padre como muestra de sumisión al Sultán y como garantía. Fue criado por el mismo Murat II (padre de Mehmet II, el cual lo tuvo como a un hermano) en ciudades como Adrianópolis, Egniojsor, Ened y Ninfamén, siendo el propósito evitar una nueva traición por parte del padre de Vlad.
Cuando volvió del exilio, su padre Vlad Dracul había muerto apaleado, y a su hermano Mircea le quemaron los ojos con un hierro al rojo vivo antes de enterrarlo aún con vida. Ambos hechos fueron ordenados por los Boyardos (una aristocracia local), a los cuales Vlad tuvo desde entonces odio eterno. Los turcos lo apoyaron hasta convertirlo en rey de Valaquia (antes incluso llegó a ser príncipe de Transilvania, pero sólo durante unos meses). Esto ocurrió en 1448, pero los húngaros lo expulsaron por órdenes de Juan Hunyadi, comandante en jefe de los nobles de Hungría, antiguo aliado de su padre.
Durante ocho años Vlad estuvo viajando por los lugares limítrofes de Valaquia buscando apoyo. Se sabe que en este tiempo contactó y trabó amistad con Stefan de Moldavia, quien le ayudaría en el futuro contra los turcos cuando éste se convirtió en voivoda de su país. Además aprendió varias tácticas político-militares.
Principado (1456-1462)
Cuando conoció que los turcos habían sido rechazados por los húngaros se lanzó al ataque del poder que ostentaba Vladislav II, protegido de los turcos. Junto con un contingente de Transilvania derrotó al voivoda e hizo que lo ejecutaran en la plaza pública de Tirgoviste, justo donde había muerto su hermano. Una vez convertido en príncipe, en 1456, los reinos cristianos lo reconocieron como tal.

Él fue despiadado y en las ciudades donde no lo aceptaban se realizaban ejecuciones por empalamiento de hombres, mujeres y niños, como en los casos de Kronstadt (Brasov) y Hermannstadt (Sibiu), ambas ciudades habitadas por colonos alemanes que no querían comerciar con él o que no querían pagarle tributo.

Con ello iniciaría su carrera de brutales masacres, entre las que se le atribuyen el exterminio de cien mil personas entre 1456 y 1462, hechos detallados en documentos y grabados de la época, que pusieron de manifiesto su gusto por la sangre y el empalamiento, por lo que se le comenzó a llamar Ţepeş que significa en rumano: empalador .

Venganza contra los nobles boyardos
Una de sus acciones de empalamiento masivo fue en su venganza contra los boyardos, asesinos de su padre y de su hermano mayor. Vlad llevó a cabo esta venganza en la Pascua de 1459, invitando a los boyardos a una gran cena de Pascua pidiéndoles a estos que se pusieran sus mejores galas. Cuando terminaron de cenar, Vlad mandó empalar a los más viejos, mientras que a los jóvenes les obligó a ir hasta Târgoviste, hasta un castillo en ruinas que había en un monte cercano al río Arges. Los boyardos fueron a pie, y muchos perecieron en el camino, pero los que llegaron aún con vida, fueron obligados a construir el castillo de Dracula, y así, sus preciosas ropas de gala, quedaron convertidas en harapos, mientras, obligados a construir el castillo, iban muriendo de cansancio y agotamiento ante el deleite del Empalador, que pudo realizar su venganza y al mismo tiempo construir su castillo.

ANECDOTAS
Mensajeros turcos

A unos mensajeros turcos les preguntó que por qué eran tan irrespetuosos y no se sacaban el turbante en muestra de respeto ante su presencia. Los mensajeros respondieron que no acostumbraban a hacerlo. Vlad decidió reforzar sus costumbres y los devolvió a Estambul con los turbantes clavados a los cráneos, para que nunca se los sacasen.

El comerciante
Un buen día, un comerciante florentino se presentó en su castillo para denunciar que le habían robado una bolsa de monedas de oro. El príncipe le dijo que volviera al día siguiente. Cuando el mercader retornó al día siguiente, los ladrones y todos los miembros de sus familias estaban empalados en el patio de castillo. Frente a ellos, Vlad en su trono y la bolsa robada.

Entonces el Empalador le pidió al comerciante que contara las monedas de la bolsa, para comprobar si faltaba alguna. El aterrorizado extranjero las contó cuidadosamente, y probablemente demasiado asustado para mentir, musitó finalmente: -Sobra una.

Vlad le contestó: -Tu honradez te ha salvado. Si hubieras intentado quedártela, habrías acabado en la estaca más alta, junto con éstos..

Las caravanas de comerciantes
Ocurrió que unas caravanas de comerciantes alemanes en su ruta desde Serbia hasta Hungría no llegaron a pararse en Valaquia y comerciar con Vlad. Éste, al enterarse de la falta de respeto hacia él y su pueblo, mandó capturar las caravanas y asesinar a los 600 comerciantes que las componían exceptuando a dos, a uno de ellos le sacó los ojos y a otro le cortó la lengua y les hizo volver con las cabezas de los comerciantes a Serbia.

La amante
Vlad tuvo muchas amantes a lo largo de su vida, probablemente debido al hecho de que le duraban muy poco. Un día que Vlad estaba de mal humor una de sus amantes le dijo para complacerle que estaba embarazada de él. Vlad le envió una matrona para que la examinase y cuando ésta le dijo que no había tal embarazo le rajó literalmente el vientre a su amante gritando que quería ver el fruto de sus entrañas.

Castigó duramente el adulterio y no dudó en empalar a todas aquellas mujeres que fueran acusadas de ello.

El monje empalado
Un día cuando Vlad paseaba con un monje junto a un bosque de empalados, éste le dijo que el hedor era insoportable, pero se lo dijo en tono de sorna. Vlad le miró con ojos incendiarios y ordenó que lo empalaran en el palo más alto que hubiera. Cuando el monje ya estaba empalado el príncipe le preguntó si allí arriba olía mejor.

La mujer holgazana
Vlad se encontró con un hombre trabajando en el campo que parecía falto de mujer por el aspecto de sus ropas. Al preguntarle si no estaba casado éste le dijo que sí. Vlad hizo traer a la mujer y le preguntó qué hacía en sus días, y ésta le dijo que lavar, hacer el pan y coser. Señalando a las ropas de su marido, Vlad no le creyó y decidió empalarla a pesar de que el marido afirmaba estar satisfecho con ella. Luego obligó a otra mujer a casarse con este hombre no sin antes amenazarla con el mismo destino si no cuidaba bien del campesino.

El voivoda Dan
Otra de sus acciones fue la muerte al voivoda usurpador Dan, a causa de que éste quiso derrocar a Vlad del poder de Valaquia, no sin que antes Dan cavara su propia tumba y asistiera a sus propios funerales. Ocurrió en 1460.

Los monjes mendigos
Cuando Vlad fue de visita a un pueblo de Valaquia, vio como dos monjes le pedían limosna. El príncipe les preguntó que por qué pedían limosna si podían vivir sin penurias colaborando en cualquier iglesia y éstos le respondieron que mendigando podrían saber si iban a entrar o no en el reino de los cielos, a lo que Vlad sin más miramientos, les mandó empalar y les dijo que así sus dudas quedarían resueltas de inmediato.

La copa de oro
También puso en una fuente de la plaza de la capital de Valaquia, Tirgoviste, una copa de oro para que todo el mundo bebiera en ella, pero aquel que la robara se sometería a la justicia del príncipe. Durante los años de su reinado nadie osó robar la copa de oro. Incluso tras su muerte la copa siguió durante un largo período en la fuente debido al temor que había infundado Vlad en los habitantes.

Torturas a animales
Incluso cuando estaba prisionero o en el exilio, se dedicaba a torturar y mutilar pájaros y otros animales pequeños, como ratones y ardillas, y Llegaba también a empalarlos.(Aunque después de hacer esto les pedía perdón)

La crueldad del siglo XV
Justicia y sadismo, sangre y tortura, bosques de empalados y valentía sobrehumana. Los historiadores que defienden a Vlad III el Empalador como un héroe nacional destacan que, en aquel tiempo y lugar, el ejercicio del terror total era la única manera de mantener a raya a las fuerzas abrumadoramente superiores que, desde un lado y otro, se disputaban las puertas de Europa y de Asia. Desde esta perspectiva, Vlad Tepes habría sido simplemente un hombre de su tiempo, con la moral de su tiempo e incluso dotado de un sentido de la justicia y el patriotismo poco usual para época tan convulsa, quien hizo estrictamente lo necesario para acobardar a los masivos ejércitos extranjeros y a los desestabilizadores del interior.

Leyenda de vampiro
En la literatura y el cine fue el modelo del género de terror y del vampirismo, ya que se dice que bebía la sangre de sus víctimas en copas mientras comía delante de los empalados. Su sádica personalidad la tomó Bram Stoker como modelo para su obra Drácula, escrita en 1897. Para 1976, el gobierno comunista de Nicolae Ceauşescu lo declaró Héroe de la nación al cumplirse el V Centenario de su muerte. Se han realizado infinidad de películas sobre el personaje pero siempre desde la perspectiva del vampiro y no de su biografía real durante todo el siglo XX.


FUENTE: Wikipedia